Síntesis del segundo capitulo de "Yo argumento" por Padilla Constanza, Douglas Silvina y López Esther.

 

Síntesis del capítulo 2[1]

Existen 3 niveles que son de gran utilidad para el análisis de los textos argumentativos: nivel pragmático, global y local.

Nivel Pragmático: intencionalidad contexto

            Es un nivel de análisis que permite: que los participantes se ubiquen en su marco situacional e indicar la fuente institucional del discurso, posturas, perspectivas, valores y datos construidos por los discursos argumentativos. La argumentación depende de la situación en la que se produce.

Tres tipos de categorías contextuales:

-       Situación potencial: es el lugar institucional donde se encuentran los géneros del discurso.

-       Situación actualizada: es la situación definida y sus respectivos participantes, relativos al problema específico.

-       Contexto polémico: es un desacuerdo que hace que los participantes se separen y discutan (intercambio argumentativo).

En el contexto hay una situación en la que se instaura un objeto de discusión, y el enunciador da su propio punto de vista sobre ese objeto de discusión.

El carácter dialógico de toda argumentación surge de las interacciones cotidianas donde alguien presenta su propio punto de vista y lo somete a consideración de los otros que pueden tener diferentes posturas y rechazar la propuesta.

Posibilidades a cómo el enunciador muestra su intención argumentativa para influenciar en el pensamiento del otro:

-       Estrategia justificativa: el enunciador justifica y argumenta una tesis, sin tener en cuenta otros puntos de vista.

-       Estrategia polémica: el enunciador compara su postura con otras para refutarlas y reforzar la suya.

-       Estrategia deliberativa: el enunciador brinda datos o ejemplos para llegar a su propia postura y va llevando al destinatario a aceptar la misma conclusión que él defiende (no hay postura negativa).

Nivel global: las categorías estructurales

            Los teóricos de la argumentación no están de acuerdo a la existencia de ujna estructura global del texto argumentativo y no hay consenso en la determinación de las categorías estructurales. Además, los textos reales presentan diferentes modos de organización. Consideramos que a partir de un objeto de discusión, el enunciador arma una tesis, y para demostrarla, parte de un conjunto de premisas.

Tesis y conclusión

A partir de la estrategia justificativa, la tesis es el punto de vista del enunciador con respecto a un objeto de discusión. Para una estrategia polémica se desarrolla también una tesis adversa o la opinión de otra persona.

Para iniciar el diálogo discursivo, el discurso de enunciador responde los enunciados del discurso citado. Parecen los discursos en contextos donde esos enunciados contradicen y aparecen como inconsistentes.

Para ambas estrategias, la conclusión es la confirmación de la tesis propuesta. No necesariamente la tesis es la conclusión, sino que es una determinada posición que puede investir a la argumentación en todos los niveles.

En la estrategia deliberativa, lo que se presenta como conclusión es la tesis, ya que esta última no está explicitada desde el comienzo.

Las premisas

            En un pasado, las premisas eran hechos conocidos y aceptados por todos. Ahora decimos que son  afirmaciones de valor general (normas, leyes, principios) que constituyen la base de la argumentación y permiten que se llegue a ciertas conclusiones a partir de argumentos.

            Hay un problema con la “verdad” de las premisas, en qué se considera verdadero o no en determinado tiempo y lugar.

            Se plantean dos características:

-       Carácter no discutible

-       Estabilidad precaria en la argumentación cotidiana, porque depende de lo que se considera indiscutible por diferentes actores sociales y en contextos culturales o históricos específicos.

Las premisas pueden ser de distintas naturalezas: hechos (frutos de la observación), presunciones (las buenas intenciones de una persona honesta), valores (justicia, verdad, igualdad). Los lugares son premisas de orden general, los cuales permiten una base para los v alores y jerarquías que intervienen para justificar nuestras elecciones. Estos lugares pueden variar con la época. 

Clasificación de los lugares:

-       Lugares de cantidad: anteponer el valor de las cosas a través de razones cuantitativas. Los números y las cifras tiene un gran efecto argumentativo. Como tener muchos bienes, creer lo que cree la mayoría y preferir lo ordinario.

-       Lugares de calidad: se comienza a cuestionar la eficacia de la cantidad y se aprecia más lo único, original e inapreciable. Lo que consideramos un valor concreto es único, pero lo que creemos único se vuelve valioso. Como preferir lo difícil, vivir cada día como si fuera el último y fijarse en lo que no se puede repetir.

-       Lugar de lo existente: se pone más atención a lo real, vivido, actual, eventual o imposible.

Los argumentos

            Existen los argumentos propuestos, los que son elaborados por el enunciador; y los argumentos adversos que son los que el enunciador pone en boca de su adversario.

            Tipos de argumentos:

-       Argumentos mediante ejemplos: los ejemplos se usan como evidencia para apoyar una generalización. Sin embargo, en la argumentación científica, para que sirvan como argumentos, la cantidad de ejemplos debe ser representativa para que se justifique la generalización. Utiliza el ejemplo ilustrativo para hacer un contraejemplo y refutar teorías. En la argumentación cotidiana, se recurre al ejemplo único, apoyándose en el lugar de calidad, suponiendo que el ejemplo es ilustrativo para apoyar una tesis.

-       Argumentos por analogía: discurren de un ejemplo específico a otro ejemplo, argumentando que, gracias a que los dos ejemplos son semejantes en muchos aspectos, son también semejantes en otro aspecto más específico.

-       Argumentos de autoridad: incluye una cita de autoridad, la cual es un referente en el tema en cuestión, y constituye una fuente confiable y respetabe, otorgándole poder a la tesis. Las palabras de personas reconocidas se utilizan como evidencia o fundamento de la verdad. La validez de los enunciados se asienta en la autoridad del enunciador y no en las pruebas.

-       Argumentos causales: establece relaciones de causalidad complejas, por eso se da una policausalidad, donde un efecto puede ser el resultado de varias causas posibles, o una causa puede ocasionar muchos efectos.

Los modos de organización

            Teniendo en cuenta las estrategias de justificación, polémica y deliberativa; podemos hallar alternativas de disposición de las categorías:

-       Para la estrategia de justificación: objeto, tesis propuesta, premisas o datos, argumentos y conclusión.

-       Para la estrategia polémica: objeto, tesis propuesta, premisas o datos, tesis adversa, argumentos de la tesis adversa, refutación a la tesis adversa, argumentos de la tesis propuesta y conclusión.

-       Para la estrategia deliberativa: objeto, premisas o datos, argumentos y tesis/conclusión.

Estas categorías estructurales no siempre estas explícitas ni responden a un orden fijo, ya que estos modos de organización no se presentan de manera tan definida en los textos reales. Muchas veces se reconstruyen, dependiendo el texto.

Nivel local: estrategias discursivas.

            Se atiende al uso de recursos locales para darle pistas al lector acerca de cómo debe leerse un texto argumentativo. Hay pautas que nos permiten determinar cómo el enunciador evalúa las voces que va introduciendo en su propio texto, como cuál es la tesis sostenida, la adversa, posturas contrarias a las suyas, las premisas y sus argumentos. Pero no siempre están explícitos estos indicadores locales.

Recursos o estrategias que ponen en evidencia la subjetividad del enunciador:

Modalidades discursivas

            Parten de la distinción de dos tipos de relaciones en el concepto de modalidad:

-       Modalidades de la enunciación: indican el tipo de comunicación entre el enunciador y el destinatario, ajustándose a la forma lingüística (modalidades enunciativa, asertiva o declarativa; interrogativa; exclamativa e imperativa). Las modalidades más convenientes para una argumentación son asertiva o la interrogativa.

-       Modalidades del enunciado: ponen den manifiesto la relación entre el enunciador y su propio enunciado, a través de diferentes alternativas:  

·       Modalidades lógicas o intelectuales: suspenden o refuerzan una aserción

·       Modalidades apreciativas: aspectos afectivos en relación enunciador/enunciado.

·       Modalidades valorativas: pertinencia de los planteamientos argumentativos

·       Modalidades desiderativas: evidencian los deseos del enunciador

·       Modalidades de necesidad: la postura del enunciador

Las modalidades más convenientes para una argumentación son las lógicas y las valorativas.

Sin embargo, en los textos concretos estas modalidades aparecen estrechamente imbricadas.

Enunciados polifónicos

-       La negación polémica: reacción a una afirmación real o virtual del enunciador. El enunciador 1 expresa un punto de vista que es retomado por el enunciador 2 que es contrario al punto de vista del primero.

-       Estructuras adversativas: expresadas con el conector “pero”, donde dos segmentos responden a dos voces diferentes. El segundo segmento restringe y limita el significado del primero.

-       Estructuras concesivas.

 

 

           

 

 

 

 

 

 



[1] Padilla, Constanza; Douglas, Silvina; Lopez, Esther; “Yo argumento”, “Taller de prácticas de comprensión y producción de textos argumentativos”; Córdoba, Argentina; Comunicarte; 2011; PP 35-45.

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